En los últimos años y a nivel internacional se está introduciendo un creciente interés en el desarrollo de programas asistenciales y de investigación sobre las fases iniciales de las enfermedades mentales.
En el caso de los brotes psicóticos, la detección temprana tiene un papel muy importante. Se busca facilitar un diagnóstico diferencial certero, que facilite el pronóstico y el tratamiento precoz y así poder prevenir la cronificación de la enfermedad.

Un brote psicótico, provoca una crisis desestructurante tanto para el joven que vive la patología, como para su familia. Se producen dolores, que se hace necesario afrontar junto con un profesional de salud mental.

La aparición de un brote psicótico, despliega un proceso acompañado de emociones negativas, donde el shock es aún más fuerte, si se desconoce cuál será la evolución del cuadro.

En la Clínica de Psicoterapia Complutense hemos creado un programa donde, se asiste de una forma global, todas las necesidades que pueden surgir en la aparición de los primeros brotes psicóticos, tanto para la persona que sufre el brote psicótico, como para su familia.